Si hay algo que me gusta al viajar, es encontrar esos rincones que combinan historia, encanto y buena gastronomía. La Posada Real de Carreteros, ubicada en Casarejos, Soria, es uno de esos lugares que te transportan a otra época mientras disfrutas de una comida excepcional.

Un lugar con historia y encanto

Desde el momento en que llegas, la posada te envuelve con su arquitectura rústica y su ambiente acogedor. La casona del siglo XVIII, restaurada con mimo, conserva su esencia original con paredes de piedra y vigas de madera que cuentan historias de tiempos pasados. Es un sitio que respira tradición y que, al mismo tiempo, ofrece todas las comodidades modernas para una estancia placentera.

Una experiencia gastronómica que merece la pena

El restaurante de la Posada Real de Carreteros es, sin duda, uno de sus mayores atractivos. Aquí la cocina se basa en productos locales y recetas tradicionales que capturan la esencia de la gastronomía soriana. En mi visita, opté por probar varias especialidades recomendadas y cada plato fue una auténtica delicia:

• Chuletón de vaca madurada a la brasa – Un espectáculo en sabor y textura, perfectamente cocinado en su asador de leña.
• Revuelto de setas de temporada – Sabores intensos y una frescura que demuestra el mimo en la selección del producto.
• Cochinillo asado – Jugoso por dentro, con la piel crujiente, al más puro estilo castellano.
• Tarta de queso casera – Simplemente espectacular, cremosa y con el equilibrio perfecto de dulzura.

Cada plato estaba elaborado con cuidado, respetando los ingredientes y potenciando sus sabores naturales. El uso del horno de leña y la selección de productos de proximidad marcan la diferencia y hacen que la experiencia sea genuina.

Servicio y ambiente

El servicio fue impecable, cercano, familiar y profesional. El personal se asegura de que te sientas bien atendido sin resultar invasivo, algo que siempre valoro en un restaurante. Además, el ambiente del comedor es cálido y acogedor, con una decoración que realza la esencia rústica del lugar.

Relación calidad-precio

Los precios son adecuados a la calidad que ofrecen. Un menú completo con entrante, plato principal y postre ronda los 30-40€ por persona, una cifra más que razonable considerando la calidad de los ingredientes y la dedicación en la cocina.