La Leyenda del Motociclismo
En el apasionante mundo del motociclismo, hay nombres que trascienden el asfalto y se convierten en auténticas leyendas. Uno de esos nombres es Ángel Nieto, una figura icónica que dejó una huella imborrable en la historia de las dos ruedas. Desde sus modestos comienzos hasta su trágico final, la carrera de Ángel Nieto es un relato de perseverancia, valentía y éxito en el mundo del motociclismo.
Ángel Nieto nació el 25 de enero de 1947, en Zamora, España. Su fascinación por las motos se manifestó desde temprana edad, y a los 13 años ya estaba compitiendo en el mundo del motocross. Fue en 1964 cuando dio el salto al campeonato nacional de velocidad, marcando el inicio de una carrera que cambiaría para siempre el panorama del motociclismo español.
Proveniente de una familia modesta, Nieto se mudó a Madrid a la temprana edad de diez años, buscando oportunidades para contribuir al sustento familiar. Su pasión por las motocicletas lo llevó a convertirse en aprendiz en un taller de Vallecas. Sin embargo, la falta de recursos no detuvo sus sueños de competir en el exigente mundo de las carreras oficiales.
El destino lo llevó a Barcelona, donde encontró empleo en la fábrica de motocicletas Derbi. Su primera máquina, adquirida con esfuerzo y determinación, apenas superaba los 40 kilómetros por hora, pero fue suficiente para iniciar su aprendizaje. Nieto se sumergió en el mundo de las carreras, inicialmente compitiendo en eventos de aficionados y, audazmente, falsificando su edad para participar en circuitos.
En 1968, con apenas experiencia, logró que los directivos de Derbi le proporcionaran una motocicleta de 50 cc. Este fue el punto de partida de una carrera extraordinaria, especializándose en pequeñas cilindradas.
12+1
La década de los 70 y 80 vio a Ángel Nieto consolidarse como una fuerza imparable en el motociclismo. Su destreza en la pista y su habilidad para superar cualquier obstáculo lo llevaron a conquistar 13 títulos mundiales en diferentes categorías. Desde las 50cc hasta las 125cc, Ángel Nieto se convirtió en un sinónimo de éxito y dedicación, estableciendo récords que aún perduran en la memoria de los aficionados.
Cada victoria era un testimonio de su habilidad para entender las motos y anticiparse a sus competidores. La rivalidad con otros grandes de la época, como Barry Sheene, esculpió momentos épicos que aún resuenan en las conversaciones entre los amantes del motociclismo.
Aunque su asociación con Derbi fue fundamental, Nieto también compitió con otras marcas destacadas como Morbidelli, Kreidier, Bultaco, Minarelli y Garelli.
En 1986, tras una carrera gloriosa, decidió retirarse, afirmando que ya no disfrutaba en la moto y que sentía que era el momento adecuado.
A pesar de su retiro, Nieto continuó dejando su huella en el motociclismo. Se desempeñó como director técnico del equipo de Emilio Alzamora, quien ganó el título mundial de 125 cc en 1999. Además, incursionó como comentarista deportivo para la televisión y recibió reconocimientos como la Medalla de Oro de la Orden del Mérito Deportivo en 1987 y la Gran Cruz del Mérito Deportivo en 1993.
El 3 de agosto de 2017, el motociclismo perdió a una de sus leyendas más grandes. Ángel Nieto sufrió un accidente de tráfico en Ibiza, que finalmente le arrebató la vida. La noticia conmovió a la comunidad motociclista, dejando un vacío imposible de llenar.
Ángel Nieto, el maestro de una nueva generación de pilotos españoles, dejó un legado imborrable en el motociclismo internacional. Su espíritu pionero y su contribución al deporte lo mantendrán siempre presente en la memoria de los amantes de las dos ruedas.
SUKI ON THE ROAD 
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