
Hay quienes piensan que los cementerios son lugares oscuros, espacios para el silencio impuesto o la tristeza. Para mí, en cambio, siempre han sido todo lo contrario, refugios de calma. Me gusta visitarlos porque en ellos el tiempo se detiene. No hay prisas, no hay ruido, solo el murmullo del viento entre las piedras y…