Hoy te voy a enseñar uno de los lugares más fascinantes del planeta.

Es un espejismo, una ilusión y un milagro arquitectónico…

Un pequeño islote rocoso rodeado de una maravillosa bahía, escenario de las mayores mareas de Europa. El monte y su bahía, esconden una majestuosa abadía, uno de los más extraordinarios edificios de la arquitectura religiosa.

El Monte Saint-Michel y su abadía, fue uno de los primeros lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Una obra maestra de la arquitectura religiosa y militar cuya construcción de principios del siglo VIII ha sido reconocida por su Valor Universal Excepcional. En 1998, el lugar vuelve a ser reconocido y se incluye en los «Caminos de Santiago de Compostela en Francia».