Monasterio de San Juan de la Peña
Monasterio Viejo de San Juan de la Peña: Historia, Qué Ver y Cómo Llegar.
Historia del Monasterio
El Monasterio Viejo de San Juan de la Peña, ubicado en la provincia de Huesca, Aragón, es un enclave de gran relevancia histórica y cultural. Fundado en el siglo IX y oculto bajo una impresionante roca, fue durante siglos un centro religioso clave en la consolidación del Reino de Aragón. Su nombre se debe a su ubicación, «bajo la peña», ya que literalmente se encuentra resguardado bajo una enorme masa rocosa, lo que le confiere un aspecto místico y singular. Este monasterio fue refugio de nobles y monjes y se cree que albergó el Santo Grial durante la Edad Media. Fue también el panteón de los primeros reyes de Aragón, lo que lo convierte en un símbolo del poder monárquico y espiritual de la época.
La Leyenda
Como no podía ser de otra manera, este Monasterio también tiene una leyenda acerca de su origen.
Según la leyenda, un noble aragonés nacido en el pueblo de Atarés decidió un día renunciar a su vida de lujos para buscar refugio en una cueva del Monte Pano. Este joven era Juan de Atarés, quien decidió pasar su vida en la cueva que encontró. Vivió rezando y alimentándose de lo que la naturaleza le brindaba. Un día cualquiera, escucha pasos fuera de la cueva. Al salir, vio a un caballero vestido con lujosas prendas, y le preguntó qué hacía un noble bien vestido vagando en una cueva. De repente, un gran estruendo sacudió el lugar y las rocas de la cueva empezaron a unirse, formando columnas, arcos y bóvedas que la transformaron en un majestuoso palacio. Juan de Atarés, quien ya había sospechado que aquel caballero era el propio diablo, decidió ignorarlo. El caballero le dijo: «Si me sigues, vivirás con toda clase de riquezas y cualquier cosa que desees será tuya». Muerto de miedo, Juan se arrodilló en el suelo y comenzó a rezar con fervor hasta quedar exhausto. Cuando despertó, junto a él había un ser angelical que le habló: «Desciende al valle y dirígete al Monte Pano. Allí encontrarás una cueva donde deberás levantar un altar en honor a San Juan Bautista y encomendarle tu alma».
Así fue como Juan de Atarés construyó un pequeño altar, y pasó el resto de sus días en la cueva hasta su fallecimiento. Días antes de morir, talló una inscripción que decía: «Yo, Juan, primer ermitaño de este lugar, construí esta iglesia hasta donde mis fuerzas me permitieron, en honor a San Juan Bautista, y aquí reposo». Años después, dos nobles hermanos fueron de caza por aquellos parajes cuando uno de ellos avistó un ciervo. Al perseguirlo, llegó al Monte Pano, pero se despeñó por un precipicio. Milagrosamente, su caballo aterrizó suavemente en el fondo del barranco. Sano y salvo, el joven vio una pequeña cueva y en ella descubrió una ermita dedicada a San Juan Bautista, donde encontró el cuerpo sin vida del ermitaño Juan de Atarés. Impactado por el hallazgo, el joven regresó a Zaragoza, vendió todas sus propiedades, y junto con su hermano se retiraron a la cueva para vivir una vida de ermitaños.
Y así es como surgió el Monasterio de San Juan de la Peña, nacido del deseo de consagrar la vida y el espíritu a San Juan Bautista.
El Monasterio de San Juan de la Peña: Refugio del Santo Grial
EL SANTO GRIAL
Durante más de tres siglos, el Grial permaneció en este místico entorno, custodiado por los monjes que dedicaban sus vidas a la oración y la meditación.
Qué ver
Sala de los Concilios y Panteón de Nobles : Espacios que muestran la relevancia del lugar como centro de poder y de reunión de la nobleza.
Claustro Románico : Uno de los puntos más destacados del monasterio es su claustro, decorado con capiteles románicos que narran historias bíblicas y escenas de la vida de los santos. Cada uno de estos capiteles es una obra de arte que muestra la habilidad de los escultores medievales.
Iglesia Mozárabe : La iglesia original, con detalles de estilo mozárabe, está parcialmente integrada en la roca. Es un ejemplo de la arquitectura medieval adaptada a las condiciones del terreno.
Panteón Real : Aquí se encuentran enterrados algunos de los primeros reyes de Aragón, lo cual resalta la importancia política y religiosa del monasterio en su tiempo.
Centro de Interpretación : En el Monasterio Nuevo, cercano al viejo, se encuentra un moderno centro de interpretación que complementa la visita ofreciendo un contexto sobre la historia del monasterio y su influencia en el desarrollo de la región.
Visita el Centro de Interpretación→
Recomendaciones para la Visita
- Ropa y Calzado Cómodo : Debido al terreno irregular ya que el monasterio está rodeado de senderos, se recomienda llevar calzado cómodo, especialmente si planeas explorar la zona.
- Temporada : La mejor época para visitar es entre primavera y otoño, cuando el clima es agradable y la naturaleza en el entorno muestra su mejor cara.
- Entradas Combinadas : Considere comprar una entrada combinada que le permita visitar tanto el Monasterio Viejo como el Monasterio Nuevo y el centro de interpretación.
- Aparcamiento : Hay zonas de aparcamiento designadas cerca del Monasterio Nuevo. Desde allí se puede llegar al Monasterio Viejo en un breve recorrido.
- Visitas Guiadas : Optar por una visita guiada es ideal para conocer los detalles históricos y anecdóticos del monasterio, enriqueciendo así la experiencia.
Lugares cercanos para ver
- Monasterio Nuevo de San Juan de la Peña : Este monasterio se construyó en el siglo XVII, tras el declive del viejo monasterio. Su arquitectura moderna y su centro de interpretación lo convierten en una extensión interesante de la visita.
- Jaca : A solo 25 kilómetros, Jaca es una localidad con una rica historia y atractivos como la Catedral de San Pedro , uno de los ejemplos más antiguos del románico en España, y la Ciudadela de Jaca , una fortaleza pentagonal bien conservada.
- Santa Cruz de la Serós : Este pequeño y pintoresco pueblo se encuentra de camino al monasterio. Su iglesia de Santa María es una muestra excepcional del románico aragonés y vale la pena detenerse para disfrutar de su belleza.
- Pirineo Aragonés : El entorno del monasterio está rodeado de paisajes naturales impresionantes, ideales para el mototurismo y el contacto con la naturaleza. Existen diversas rutas que permiten explorar las montañas y los bosques cercanos.
Monasterio de San Juan de la Peña
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Más allá de su relevancia histórica, el entorno natural que rodea al Monasterio de San Juan de la Peña es de una belleza incomparable. Situado en la sierra que lleva su nombre, el monasterio se encuentra en un paisaje montañoso, con frondosos bosques de pinos y robles. Este entorno ofrece un contraste fascinante entre la naturaleza salvaje y el austero reconocimiento del monasterio. Es un lugar ideal para desconectar del mundo moderno y sumergirse en la paz y serenidad que brinda la montaña.
Cómo llegar
El Monasterio Viejo de San Juan de la Peña se encuentra a unos 25 kilómetros de Jaca. Para llegar:
Desde Jaca, toma la carretera A-1603 que conduce directamente al monasterio. Es una ruta pintoresca con bellas vistas del Pirineo Aragonés. Ten en cuenta que el acceso al Monasterio Viejo puede ser estrecho y con curvas pronunciadas, pero está bien señalizado.
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